7 de abril de 2009

Luna negra

El vaho de los susurros cabalgaban hacia el estrellado cielo, no sabía que hacer... presentía que después de aquel beso te iba a perder. Una estrella parecio tropezar ante tanta incertidumbre y desapareció dejando tan solo una flamante linea dorada que se esfumó en cuestión de segundos. Te tenía junto a mí, sí, te podía sentir, pero... ¿Por cuánto tiempo?, esta odisea de sentimientos nunca estarían anclados bajo el abismal olvido... rencor, frustración, ira, ¿alguién da más?, desisto ante tan nefasta muestra de serenidad. Cautivado por tu esencia, repto por el camino que lleva hacia tu alma, el halo de tu cuerpo me incita a tocarte, que sensación más prohibida, se que el tiempo es ancestral y que tu luz de nuevo me da vida. Sin embargo, lo dejaré todo en manos de las hermanas del destino, todo bajo una entumecida capa de sueños, donde lo vacio se llena, al contemplar esta hermosa luna negra...